DE LOS MAGOS CALDEOS A LOS FILÓSOFOS GRIEGOS

DEL MISTICISMO – MAGIA CALDEA A LA FILOSOFÍA Y NUMEROLOGÍA AGNÓSTICA GRIEGA



Hecho famoso por el relato del llamado Nuevo Testamento, “BRIT HADASHA – PACTO RENOVADO” por el cual se decía que habían seguido el comienzo del nacimiento del Mesías, los Magos eran sacerdotes del imperio persa, que fueron reconocidos en la antigüedad por su conocimiento de la magia, la astrología y alquimia. Por lo tanto, nuestra propia palabra para magia se refiere a las artes ocultas de los magos.

Sin embargo, en realidad, los magos conocidos por el mundo griego y romano no eran los mismos que los sacerdotes oficiales de la religión persa del zoroastrismo, que según se dice fue fundada por Zoroastro. Porque, cuando comparamos las ideas atribuidas a los Magos por escritores antiguos, encontramos que diferían ampliamente de lo que sabemos de la versión principal de la religión, como se encuentra en sus sagradas escrituras, el Avesta.

Más bien, parecería que los griegos habían entrado en contacto, no con sacerdotes del zoroastrismo, sino con los famosos MAGUSSAEANOS de Asia Menor, en lo que ahora es Turquía. Estos MAGUSSAEANS fueron emigrados persas que encontraron su camino a la región después de que había sido dominada por los persas. Hablando el idioma arameo, en lugar de palahvi, no pudieron leer sus propias escrituras en su lengua original, y por lo tanto se desviaron de la fe.




BABEL - BABILONIA


Básicamente, EL CULTO A LOS MAGUSSAEANS fue una combinación de zoroastrismo herético y astrología babilónica. Cuando Ciro el Grande conquistó la gran ciudad de Babilonia en el siglo VI a. C., los Reyes Magos entraron en contacto con las enseñanzas de los astrólogos de la ciudad, conocidos como caldeos. Según Diodoro de Sicilia, un historiador griego del 80 al 20 a. C., y autor de una historia universal, Bibliotheca historica:

... siendo asignados al servicio de los dioses, pasan toda su vida estudiando, su mayor renombre es en el campo de la astrología. Pero también se ocupan en gran medida de adivinanzas, hacen predicciones sobre eventos futuros y, en algunos casos, por purificaciones, en otros por sacrificios y en otros por otros encantos, intentan evitar las cosas malas y el cumplimiento de los buenos. También son hábiles en la adivinación del vuelo de las aves, y dan interpretaciones tanto de sueños como de portentos. También muestran una marcada habilidad para hacer adivinaciones a partir de las observaciones de las entrañas de los animales, al considerar que en esta rama tienen un éxito eminente.

Aunque a menudo se ha considerado que la astrología representa una antigua forma de conocimiento ideada por los babilonios, los estudiosos ahora han determinado que su desarrollo era imposible, antes del siglo VIII Antes del Mesías, debido a la ausencia de un sistema confiable de cronología, y eso, más adecuadamente, la astrología fue un producto del siglo sexto antes de Mesías.

Esta transformación, según Bartel van der Waerden, fue el resultado de la influencia del zoroastrismo, con su doctrina de que el alma humana se originó en las estrellas.

Además, el siglo sexto antes de Mesías también se conoce en la historia judía como el exilio, cuando toda su población se encontraba en la ciudad, después de que Nabucodonosor lo había trasladado a principios de siglo, después de haber destruido Jerusalén. Habiéndose convertido en ciudadanos importantes, y algunos lograron puestos administrativos menores, es posible que los judíos también hayan contribuido a este desarrollo.

De hecho, en el Libro de Daniel, Capítulo 2:48, Daniel es nombrado jefe de los "sabios" de Babilonia, es decir, de los Magos o Caldeos. En cualquier caso, los estudiosos ciertamente han reconocido que las enseñanzas posteriores, denominadas colectivamente como la Cabalá esotérica, parecen haber sido una combinación de la tradición mágica y caldea.

La astrología no era un componente de la corriente principal del zoroastrismo, y aquellos que incorporaron sus conceptos en su versión de la fe parecen haber sido considerados heréticos. Como describe Edwin Yamauchi, "la relación de los Magos con Zoroastro y sus enseñanzas es un tema complejo y controvertido". Desde los primeros días del imperio persa, había existido un antagonismo con los defensores del verdadero zoroastrismo y los magos. Y, según el asiriólogo francés Lenormant, "a su influencia deben atribuirse casi todos los cambios que, hacia el final de la dinastía aqueménida, corrompieron profundamente la fe zoroástrica, de modo que pasó a la idolatría".


BEL - SEÑOR


BEL es una palabra que proviene DEL ACADIO BĒLU, significa Señor o Amo, siendo más un título que un nombre personal. su equivalente en las lenguas semíticas es Ba'al, siendo su forma femenina Belit o Bēltu; Señora o Dueña.

En la religión mesopotámica se le aplicó como epíteto a varios dioses. Los autores griegos lo trasliteraron como Belos, incorporándolo a su mitología y pasó al latín con la forma Belus.

BEL FUE USADO ESPECIALMENTE PARA DESIGNAR AL DIOS MARDUK, y en tal sentido entra en la composición de varios nombres propios asirios y neo babilónicos. Del mismo modo, BELIT FUE USADO COMO EPÍTETO DE SARPANIT, ESPOSA DE MARDUK, sin embargo, también SU MADRE CONOCIDA COMO NINHURSAG, DAMKINA O NINMAH y otras divinidades femeninas de origen sumerio FUERON LLAMADAS BELIT–ILI (“SEÑORA DE LOS DIOSES”) en acadio.

A través de los siglos, otros dioses también recibieron el título de Señor y fueron identificados, total o parcialmente, con Bel Marduk, como por ejemplo el ZEUS BELOS mencionado por Sanjuniatón como hijo de Crono es probable que se refiera a Marduk.

Se cree que Zoroastro era un monoteísta, pero fueron los Reyes Magos quienes intentaron reintroducir el paganismo de su antigua herencia iraní. Según Heródoto, los persas habían aprendido la adoración de "Mitra" de los babilonios. Mitra, o Mitra era una antigua deidad iraní, que los magos asimilaron a Bel, el dios principal de los babilonios. Bel, o Marduk, era una especie de dios moribundo adorado en todo el antiguo Medio Oriente. Cada año, correspondiente a nuestra Pascua, se celebraba su muerte y resurrección, que se cree simboliza el ciclo de fertilidad de la naturaleza. Era un dios reconocido como el Sol, y a menudo simbolizado por el toro, pero también como un carnero o una cabra.

En el Tanaj BEL ES NOMBRADO en Yeshayah 46:1,3 Yirmeyah 50:24 y Yirmeyah 51:44.5 en todos estos casos parece referirse al mismo Marduk anunciando su derrota y humillación como divinidad de los opresores de Yisrael.

En imitación de la tríada babilónica de BEL, SHAMASH Y LA DIOSA ISHTAR, Mitra fue reconocida como una de las tres deidades principales, junto con Ahura Mazda y Anahita, como el Sol, la Luna y Venus. Los persas también adoraron a los "cuatro elementos".

POR LO TANTO, SEGÚN EL   GEÓGRAFO GRIEGO STRABO DEL SIGLO I DC:

“Ahora los persas no erigen estatuas o altares, sino que ofrecen sacrificios en un lugar alto, con respecto a los cielos como Zeus [Ahura-Mazda]; y también adoran a Helios [el Sol], a quien llaman Mitra, y Selene [Anahita o la Luna] y Afrodita, y fuego y tierra y vientos y agua [los cuatro elementos]”

Como se creía que descendía allí en invierno, este dios moribundo también estaba asociado con el Inframundo. Fue a través de él que los hechiceros debían consultar para consultar con los espíritus difuntos que habitaban allí. Por lo tanto, los Magos adquirieron su renombre como nigromantes, o el poder de convocar espíritus malignos. El culto al demonio estaba completamente prohibido en el zoroastrismo ortodoxo. Esto significaría que los magos conocidos en el oeste fueron los condenados en numerosos casos en los textos zoroastrianos como un "daeva" o secta adoradora de demonios de la fe. Por lo tanto, en Lucian, cuando uno de sus personajes desea descender al inframundo, describe: mientras estaba desconcertando sobre estos asuntos, se me ocurrió ir a Babilonia y preguntarle a uno de los Magos, los discípulos y sucesores de Zoroastro. Había escuchado que podían abrir las puertas del inframundo con ciertos hechizos y ritos y conductas y traer de vuelta a salvo a quien quisieran.


ZURVANISMO


A juzgar por los relatos del siglo IV aC de Eudemus de Rodas, un alumno de Aristóteles, y el historiador griego Theopompus, estos MAGUSSAEANOS eran adherentes de la herejía zurvanita. Partiendo de las concepciones de los caldeos, Zurvan Akaran, o Boundless Time or Fate, fue visto como el padre de los hijos gemelos, Ahura Mazda y Ahriman, el espíritu maligno. Estos dos luchan entre sí durante doce mil años, divididos en cuatro ciclos de tres mil años, con cada milenio gobernado por un signo del zodíaco.

Durante los primeros tres mil, gobernados por Aries, Tauro y Géminis, Ahura Mazda creó la luz, inspirada en la luz celestial. Los segundos tres, Cáncer, Leo y Virgo, son el período de la creación de la vida en el mundo material: vegetación, fuego, el toro primigenio y Gayomart, el hombre primordial. En el tercer período, Ahriman, que ha sido encarcelado en la oscuridad, es revivido por la puta y renueva su asalto a Ahura Mazda y su creación.

Antes del final, Ahura Mazda ahora provoca la resurrección, y desde el cadáver del Toro la tierra es fertilizada, y del Hombre Primordial, conocido como Gayomart, crea los antepasados ​​de la humanidad. Luego, la tierra se llenará de maldad hasta la llegada de Zoroastro, cuyo advenimiento comienza el período final que durará hasta el Día del Juicio, con la llegada del salvador, cuando una inundación de metal fundido quemará a los malvados, mientras que pasarán los justos. ileso, y el bien y el mal finalmente se separan uno del otro.

El emperador persa Ciro había atacado a Creso, rey de Lidia En 546 a. C., lo derrotó y anexó Asia Menor a su reino, seguido de la conquista gradual de las pequeñas ciudades-estado griegas a lo largo de la costa. El hijo de Ciro, Cambises, agregó Egipto en 525 a. C., y después de él, en 522, Darío llegó al poder y se dedicó a consolidar y fortalecer el imperio persa. De 521 a 484 a. C., Darío expandió aún más el imperio con conquistas en India, Asia central y Tracia europea.

Con Ciro llegó el asentamiento de muchos medos y persas acompañados por sus magos. El hecho de que los griegos supieran de Zoroastro y de los Magos es suficiente para asegurarnos algún grado de contacto. El primero entre los griegos en mencionar a Zoroastro por su nombre fue Xanthus de Lidia, en el siglo V a. C. Empedocles dejó un poema inacabado sobre las guerras persas, en el que se sospechaba que hablaba de Zoroastro, y Heródoto hablaba de los Magos como una tribu de los medos, aunque sin mencionar a Zoroastro. En el siglo V a. C., Ctesias hace de Zoroastro un rey de Bactria rodeado de magos. Theopompus, en el siglo IV a. C., habló de la relación de Ahura Mazda y Ahriman en el contexto zurvanita. Finalmente, en el siglo IV a. C., Dinon, el historiador de Persia, conectó a Zoroastro etimológicamente con las estrellas, demostrando que desde una fecha temprana Zoroastro estaba erróneamente relacionado con la astrología.

Como resultado, todas las primeras ideas de los filósofos presocráticos sugerirían que habían entrado en contacto con magos en Asia Menor. Así encontramos entre ellos la presencia recurrente de las doctrinas típicas de dualismo, panteísmo, astralismo, los cuatro elementos y la creencia en la reencarnación. La influencia de los Magos en la filosofía griega ha sido propuesta por algunos de los principales estudiosos del siglo XX. En Early Greek Philosophy and the Orient, ML West ha sugerido que la introducción de las creencias persas y babilónicas en Grecia fue atribuible a que los magos huyeron al oeste de la anexión de los medios de comunicación por parte de Ciro.

EN ALIEN WISDOM: THE LIMITS OF HELLENIZATION, ARNOLDO MOMIGLIANO AFIRMA:

Los que han sostenido que Pherecydes de Syros, Anaximandro, Heráclito e incluso Empédocles derivaron algunas de sus doctrinas de Persia, no siempre han sido conscientes de que la situación política era favorable a tales contactos. Pero esto no se puede decir del profesor ML West, el último defensor de los orígenes iraníes de la filosofía griega. Ciertamente sabe que si hubo un momento en que los Magos pudieron exportar sus teorías a un mundo griego listo para escuchar, era la segunda mitad del siglo VI a. C. Es indudablemente tentador explicar ciertas características de la filosofía griega temprana por las influencias iraníes. La repentina elevación del Tiempo a un dios primitivo en Pherecydes, la identificación de Fuego con Justicia en Heráclito, la astronomía de Anaximandro colocando las estrellas más cerca de la Tierra que la luna,

Según Plinio, fue Osthanes, un supuesto discípulo de Zoroastro, conocido como el "príncipe de los magos", quien dijo haber acompañado a Jerjes en su campaña contra Grecia, quien "fue el principal responsable de provocar entre los griegos, no solo un apetito". pero una obsesión loca por este arte ". Se dice que Osthanes se convirtió en el maestro de Demócrito, nacido en 460 a. C. Aparentemente, Demócrito también visitó Babilonia y resumió los resultados de sus investigaciones en un Tratado caldeo y Sobre los escritos sagrados de los que están en Babilonia. Como resultado de su visita a Persia, escribió Mageia.


ORFISMO


Heráclito, un filósofo griego del siglo sexto antes de Mesías, equiparó los ritos de los bacantes con los de los magos, y comentó:

“si fuera por Dioniso que llevaran a cabo procesiones y cantaran himnos a las partes vergonzosas [phalli], sería un acto más descarado; pero Hades y Dioniso son los mismos, en cuyo honor se vuelven locos y celebran los ritos báquicos, y de los Nightwalkers, Magi, Bacchoi, Lenai y los iniciados, a toda esta gente amenaza con lo que sucede después de la muerte: por los ritos secretos practicados entre humanos se celebran de una manera impía. Un papiro de Derveni., cerca de Tesalónica, perteneciente al siglo IV a. C., leemos sobre "encantamientos" de los Magoi que son capaces de aplacar a los daimones que podrían traer desorden ... Por lo tanto, los Magoi realizan este sacrificio como si fueran a pagar una enmienda, y los iniciados de Dioniso, primer sacrificio a los Eumenides, como el magoi”

Según las teogonías órficas, Kronos, o tiempo, se describe como una serpiente que tiene cabezas que crecen sobre un toro y un león, y en el medio la cara de un dios; y también tiene alas sobre sus hombros, y se llama Tiempo sin edad, y Herakles lo mismo. En Orfeo y en la Religión griega, Guthrie comentó que, la representación del Tiempo eterno mismo en esta forma muestra correspondencias con la religión oriental, y en particular con la religión persa, que son demasiado detalladas y exactas como para pasarlas por alto.

Se suponía que las adoradoras de Dioniso, llamadas Ménades, representaban el mito del desgarro y el comer de Dioniso, azotándose en un frenesí y haciendo pedazos a un toro vivo con sus manos y dientes desnudos, por el animal. en cierto sentido fue una encarnación del dios. Del mismo modo, Nigosian, en The Zoroastrian Faith, ha señalado que, según un texto de Zoroastrian, titulado Yasna, Yima era el instructor del sacrificio de toros, condenado por Zoroaster, que eran ritos nocturnos y orgiásticos, acompañados de gritos de alegría, y combinado con el haoma, una bebida embriagadora preparada a partir de la planta sagrada del zoroastrismo.

Los Orphics adoraban a Phanes, una bella figura con alas en sus hombros, cuatro ojos y cabezas de varios animales, nace de un huevo. De manera similar, según Plutarco, los veinticuatro dioses creados por Ahura Mazda fueron colocados en un huevo, pero los creados por Ahriman lo atravesaron y entraron, y por lo tanto el mal ahora se combina con el bien. Zeus se traga a Phanes, tomando todo lo que existe dentro de sí mismo, un mito que dio origen al dualismo típico de los Orphics, según el cual el alma del hombre es vista como creada por el dios verdadero, mientras que la materia es creada por el dios malvado.

Aunque el dualismo órfico no tomó prestado el simple dualismo del zoroastrismo, siendo una oposición entre un dios bueno y malo, puede haber sido elaborado a partir del zurvanismo. Theodore bar Konai y Eznik, Zurvan le dice a Ahriman: "He hecho que Ormazd gobierne sobre ti", lo que significa, como Zaehner ha demostrado, que Ahriman gobierna el mundo material, mientras que Ormazd es nombrado sobre el mundo del espíritu. Del mismo modo, según la Teogonía órfica, Phanes hizo al mundo en su estado primitivo, pero Zeus se tragó a Phanes y luego produjo el mundo conocido por la humanidad. Así, Phanes fue interpretado como el creador del reino espiritual, mientras que Zeus dio origen al cosmos de la materia.


PITÁGORAS


Según Apuleius, Pitágoras fue capturado por Cambises durante su invasión del país y llevado de regreso a Babilonia junto con otros prisioneros. En Babilonia, mantiene Pórfido PITÁGORAS FUE ENSEÑADO POR ZARATAS, un discípulo de Zoroastro, y se inició en los más altos misterios esotéricos de los zoroastrianos. Aristoxeno, amigo y alumno de Aristóteles, que provenía originalmente de los círculos pitagóricos, también había sostenido que Pitágoras había sido alumno de Zaratas.

Según Iamblichus, Pitágoras viajó a Phoenici, donde conversó con los profetas que eran descendientes de Moschus, o Moisés, el fisiólogo, y con muchos otros, así como con los hierofantes locales. De sus ideas, mantenía Hermippus, un escritor griego que vivió alrededor del año 200 aC, Pitágoras practicó y enseñó esto imitando las creencias de los judíos y los tracios, que él se había apropiado para sí mismo. Josefo también creía en la afinidad de Pitágoras por las ideas judías: ahora está claro que no solo conocía nuestras doctrinas, sino que en gran medida era un seguidor y admirador de ellas. Porque se afirma verdaderamente de este Pitágoras, que él tomó muchas de las leyes de los judíos en su propia filosofía.

Pitágoras propuso una doctrina conocida como la Música de las Esferas, según la cual se pensaba que las distancias y velocidades de las órbitas de los planetas creaban una armonía musical que era inaudible para los humanos. La doctrina, que presuponía que las distancias entre las esferas planetarias tienen las proporciones de números enteros simples, era originalmente una teoría babilónica. Jámblico explicó que fue en Babilonia donde Pitágoras aprendió matemáticas, música y todas las demás ciencias.

SEGÚN FILÓN DE ALEJANDRÍA:

“Los caldeos parecen, más allá de todos los demás hombres, haberse dedicado al estudio de la astronomía y de las genealogías; adaptando las cosas en la tierra a las cosas sublimes, y también adaptando las cosas del cielo a las cosas en la tierra, y como las personas que, aprovechando los principios de la música, exhiben una sinfonía más perfecta que existe en el universo por la unión común y la simpatía de partes para otra, que a través de separadas en cuanto a lugar, no están desunidas con respecto a las afines”

Los eruditos no han podido explicar la procedencia de la creencia de la reencarnación entre los griegos. Heródoto sostuvo que la creencia fue adoptada de los egipcios, pero no se encuentra esa doctrina entre ellos. Algunos han pensado en sugerir una transmisión desde la India, pero es improbable, ya que la creencia en la reencarnación surgió allí bastante tarde. Aunque la reencarnación no se encuentra en el zoroastrismo ortodoxo, habría sido un principio importante de los Magussaeans, ya que como  Porphyry Según los informes, los Magos se dividieron en tres clases, "de las cuales las más sabias y superiores no comen ni matan a ninguna criatura viviente y perseveran en la vieja abstinencia de carne", la segunda no consume animales salvajes ni animales domésticos, y incluso el tercero solo de ciertas especies, porque las tres clases creen en la metempsicosis.


PLATÓN


Según Momigliano, fue Platón quien hizo que la sabiduría persa estuviera completamente de moda, aunque el lugar exacto de Platón en la historia es ambiguo y paradójico. Un fragmento de las filosofías Peri de Aristóteles asociaba la enseñanza de Platón con el dualismo de los Magos. En las Leyes, sugiere la necesidad de dos almas para gobernar el universo: lo que hace el bien y lo que tiene la capacidad opuesta, una idea que el profesor Werner Jaeger considera en última instancia zoroastriano. La filosofía de Platón incorpora además un dualismo órfico, evidente en varios de sus diálogos, incluidos Timeo, Phaedo, Gorgias y Cratylus. Él define una parte divina y una parte mortal del alma humana, la parte mortal se atribuye a la "naturaleza titánica" dentro del hombre.

El hombre considerado más responsable de presentar los principios de Magian a Platón fue uno de sus amigos, un matemático y astrónomo jónico, Eudoxus de Cnidus, que parece haber actuado como jefe de la Academia durante la ausencia de Platón. Se dice que Eudoxo viajó a Babilonia y Egipto, estudiando en Heliópolis, donde aprendió la sabiduría sacerdotal y la astronomía. Según Plinio, Eudoxo deseaba que la magia fuera reconocida como la más noble y útil de las escuelas de filosofía.

La gran exposición del pensamiento de los magos en el idioma griego es el Timeo, donde Platón trató los temas mágicos comunes del tiempo, las tríadas, el panteísmo, la astrología y los cuatro elementos. Se expusieron ideas similares en Epinomis, y aunque puede que no haya sido su trabajo, deberíamos esperar que al menos no hubiera negado el origen de su religión recién descubierta, que el autor reconoce como perteneciente originalmente a los egipcios y a los egipcios. Sirios, desde cuando el conocimiento ha llegado a todos los países, incluido el nuestro, después de haber sido probado por miles de años y sin fin.

Los más comunes a los cuentos o motivos tomados de los Reyes Magos fueron aquellos que trataban sobre visitas al Inframundo. Platón concluyó su República con tal relato, conocido como el mito de Er. Colotes, filósofo del siglo III a. C., acusó a Platón de plagio y sostuvo que sustituyó el nombre de Er por el de Zoroastro. Clemente de Alejandría y Proclus citan un trabajo titulado Sobre la naturaleza, atribuido a Zoroastro en el que se le compara con Er. Citando la apertura de la obra, Clement menciona:

Zoroastro, entonces, escribe: "Estas cosas que escribí, yo Zoroastro, hijo de Armenio, un pamphylian de nacimiento: habiendo muerto en la batalla y estado en el Hades, las aprendí de los dioses". Este Zoroastro, dice Platón, habiendo sido colocado en la pira funeraria, volvió a la vida en doce días. Alude quizás a la resurrección, o tal vez al hecho de que el camino para las almas a la ascensión se encuentra a través de los doce signos del zodíaco; y él mismo dice que el camino descendente al nacimiento es el mismo. De la misma manera, debemos comprender los doce trabajos de Hércules, después de lo cual el alma obtiene la liberación de todo este mundo.


PSEUDEPIGRAPHA ZOROASTRIANO


El interés griego en las enseñanzas orientales durante el período alejandrino resultó en la producción de un curioso conjunto de obras pseudoepigráficas, escritas en griego, y atribuidas a Zoroastro, su discípulo Osthanes, y a su patrón Hystaspes. Sin embargo, como Bidez y Cumont han tratado de demostrar, en The Hellenized Magi, estos documentos no contenían nada de contenido ortodoxo zoroastriano, sino que reflejaban las nociones mágicas y astrológicas de los Magussaeans. Momigliano describió que estas "especulaciones novedosas ganaron prestigio de la admiración académica y peripatética por la sabiduría de Zoroastro y, sin duda, mezclaron ideas platónicas con las que supuestamente eran orientales". Aunque ninguna de esas obras sobrevive, los autores antiguos mencionan algunas de ellas. Celso sostuvo que "Zoroastro y Pitágoras formularon sus doctrinas en los libros" que se conservaron hasta su tiempo, mientras que el escoliasto de Alcibíades afirma que Zoroastro dejó escritos filosóficos. Los Reconocimientos Clementinos afirman que los libros de magia bajo el título de Zoroastro circularon en gran número. Proclus, un filósofo griego del siglo IV d. C., conocía cuatro libros sobre la naturaleza de Zoroastro dedicados al rey Ciro. Hermippus, que vivió alrededor del año 200 aC, escribió un libro sobre los magos y creía en los orígenes orientales del pensamiento griego. Según Plinio, "comentó sobre dos millones de versos que dejó Zoroastro, además de completar índices de sus varios trabajos". Plinio también sabía de una obra atribuida a Osthanes, y Los Reconocimientos Clementinos afirman que los libros de magia bajo el título de Zoroastro circularon en gran número. Proclus, un filósofo griego del siglo IV d. C., conocía cuatro libros sobre la naturaleza de Zoroastro dedicados al rey Ciro. Hermippus, que vivió alrededor del año 200 aC, escribió un libro sobre los magos y creía en los orígenes orientales del pensamiento griego. Según Plinio, "comentó sobre dos millones de versos que dejó Zoroastro, además de completar índices de sus varios trabajos". Plinio también sabía de una obra atribuida a Osthanes, y Los Reconocimientos Clementinos afirman que los libros de magia bajo el título de Zoroastro circularon en gran número. Proclus, un filósofo griego del siglo IV d. C., conocía cuatro libros sobre la naturaleza de Zoroastro dedicados al rey Ciro. Hermippus, que vivió alrededor del año 200 aC, escribió un libro sobre los magos y creía en los orígenes orientales del pensamiento griego. Según Plinio, "comentó sobre dos millones de versos que dejó Zoroastro, además de completar índices de sus varios trabajos". Plinio también sabía de una obra atribuida a Osthanes, y Filón de Biblos, se refiere a una obra atribuida a él titulada Octateuco. Los escritores cristianos Justin y Lactantius citaron una profecía bajo el nombre de Hystaspes, el protector y primer converso de Zoroastro, a veces identificado como el padre de Darius.


ESTOICISMO


Al comienzo de la era helenística, la filosofía griega en este momento estaba dividida en escuelas bastante definidas, de las cuales las más importantes eran las cínicas, escépticas, epicúreas y estoicas. De estos, el más influyente fue el de los estoicos. Los estoicos adoptaron una filosofía panteísta, creyendo que toda realidad está animada por un principio racional que era al mismo tiempo la ley del universo y del alma humana, llamándola Logos, Zeus o incluso Dios. Al igual que los magos, lo equipararon con fuego. Esencialmente, los estoicos se apropiaron de su visión panteísta y fatalista del universo de los caldeos, de los cuales Filo de Alejandría mencionó:

Estos hombres, entonces, imaginaron que este mundo que contemplamos era el único mundo en el universo existente, y que era Dios mismo, o que contenía en sí mismo a Dios, es decir, el alma del universo. Luego, habiendo erigido el destino y la necesidad en dioses, llenaron la vida humana con excesiva impiedad, enseñándoles a los hombres que, con la excepción de aquellas cosas que son evidentes, no hay otra causa, sino que son las revoluciones periódicas del sol, y la luna, y otras estrellas, que distribuyen el bien y el mal a todos los seres existentes.

Los estoicos creían que el "fuego" divino, o Dios, generó el universo, y al final del Gran Año, lo devolvió a sí mismo a través de una gran conflagración. Finalmente, el fuego se extinguiría en el aire y, finalmente, en una condición acuosa en la que estaría la semilla para el próximo ciclo. Este ciclo se repite eternamente. La idea de las conflagraciones recurrentes fue atribuida por Nigidius Figulus, destacado filósofo y astrólogo romano del primer siglo antes de Mesías, a los Magos, y la noción de que el mundo sería destruido por el fuego se encuentra en el Bundahishn. Puede haber sido de los Magussaeans que Heráclito aprendió la misma doctrina. Además, en la República, Platón utilizó el Sar de Babilonia, donde aparece como el equivalente numérico del período entre catástrofes mundiales esbozado en el Timeo,

Dio Crisóstomo grabó un himno cantado por los Magos de Asia Menor debido a su parecido con la teoría estoica de las conflagraciones. En el himno, que Dio afirmó que fue cantado por Zoroastro y los hijos de los Magos que lo aprendieron de él, Zeus es retratado como el conductor perfecto y original del carro más perfecto, dibujado por cuatro caballos que representan los cuatro elementos. El himno termina en el momento en que el Fuego Divino, habiendo absorbido toda la sustancia del universo, se preparó para una nueva creación.


MITRAÍSMO


En la primera parte del siglo XX, Franz Cumont, quien fundó el estudio del mitraísmo, consideró que los Misterios de Mitra evolucionaron de los Magussaeans de Asia Menor. Sin embargo, creyendo que han refutado su hipótesis de un origen zoroástrico del culto, los eruditos modernos del tema tienden a la opinión de que era completamente una creación romana. Sin embargo, de acuerdo con Plutarco, los misterios dedicados a Mitra fueron practicados por piratas de Cilicia a principios del siglo I aC, quienes "ofrecieron extraños sacrificios propios en el Olimpo, donde celebraron ritos o misterios secretos, entre los que se encontraban los de Mitra. los ritos, celebrados por primera vez por los piratas, todavía se celebran hoy ". Del mismo modo, LACTANTIUS PLACIDUS, NOS DICE QUE EL CULTO MITRAICO PASÓ DE LOS PERSAS A LOS FRIGIOS, Y DE ELLOS A LOS ROMANOS.

Sin embargo, bajo la autoridad de Bardasenes, un cristiano sirio de finales del primer siglo y principios del siglo II d. C., los Magussaeans, dondequiera que se encontraran, observaron "las leyes de sus antepasados ​​y los ritos de iniciación de sus misterios". Aunque no tenemos información sobre la naturaleza exacta de estos misterios, debemos suponer que estaban dedicados a Mitra, y como muchos de los otros cultos de la época romana, habrían sido influenciados en gran medida por una combinación de doctrinas de Magos y Caldeos.

El tratado más largo en el hallazgo de Nag Hammadi es Zostrianos. Los gnósticos atacados por Plotino también poseían apócrifos atribuidos a Zoroastro, al igual que ciertos gnósticos, los discípulos de Prodicus, mencionados por Clemente de Alejandría. Según los reconocimientos y homilías pseudo-clementinas, una doctrina gnóstica peleada por el apóstol Pedro, supuso que Zoroastro había sido enviado para combatir la influencia invasora de los demonios malvados en el mundo, y a través de su triunfo sobre ellos, para traer una edad de oro. Se pensaba que el gobierno del mundo estaba dividido por dos Eones, uno identificado con el dios del Antiguo Testamento, un demonio vengativo, el otro con el Mesías, el dios de la luz.

Según Numenius, se cree que fue la principal influencia detrás del pensamiento de Plotinus, el fundador del neoplatonismo, para explorar la naturaleza de Dios, insistió Numenius, uno tenía que mirar más allá de la sabiduría de Platón, o incluso de Pitágoras, a todo que los brahmines, los judíos, los magos y los egipcios han establecido.

EN LA VIDA DE PLOTINO, PORPHYRY INFORMÓ DE SU MAESTRO QUE:

“A los veintisiete años fue atrapado por la pasión por la filosofía. Fue dirigido a los profesores más reputados que se encuentran en Alejandría; pero él solía volver a casa de sus conferencias entristecido y desanimado. Un amigo a quien le abrió el corazón adivinó su anhelo temperamental y sugirió a Ammonius, a quien aún no había probado. Plotino fue, escuchó una conferencia y exclamó a su compañero: "¡Este era el hombre que estaba buscando!" Desde ese día siguió a Ammonio continuamente, y bajo su guía hizo tanto progreso en filosofía que se puso ansioso por investigar lo que practicaban los persas y lo perfeccionado por los indios”

Los neoplatonistas consideraban los oráculos caldeos, una obra atribuida a Zoroastro, que combinaba elementos platónicos con credos persas o babilonios, como un texto sagrado, a veces, incluso por encima del propio Platón. Proclus habría retirado todos los libros de circulación, excepto el Timeo y los oráculos caldeos, para evitar que dañen a los que no tienen educación. Refiriéndose a los oráculos caldeos, el emperador  Julián menciona lo siguiente, en lo que generalmente se considera una de sus pocas alusiones a la doctrina de los Misterios Mitraicos, y si yo también tocara las enseñanzas secretas de los Misterios en las que el Caldeo, divinamente frenético, celebró al Dios de los Siete Rayos, ese dios a través del cual eleva las almas de los hombres, debería decir lo que es ininteligible, sí totalmente ininteligible para la manada común, pero familiar para los felices teúrgos.

Zoroastro, explicó Zosimus de Panópolis, del final del tercer y comienzo del siglo IV d. C., y probablemente el más importante de los alquimistas alejandrinos, estuvo de acuerdo con Hermes en que los hombres podían elevarse por encima del Destino, pero él tomó el camino de la magia, mientras que Hermes, por otro lado, tomó el camino de la filosofía. Se creía que el fundador del arte alquímico había sido Osthanes, a quien se le atribuyeron varios trabajos sobre la naturaleza de las plantas y los minerales. Una de las primeras obras alquímicas, escrita por cierto Bolos de Mendes en el siglo II a. C., fue atribuida a Demócrito, el reputado estudiante de Osthanes.

Tras un examen más detallado de las creencias fundamentales de estas grandes escuelas místicas, se hace evidente que, aunque parecen eclécticas, su teología subyacente es esencialmente la misma. Todos se fundaron en un ritual de muerte y renacimiento, la creencia en una tríada divina, el dualismo órfico, el panteísmo, la magia, la astrología y la creencia en la reencarnación. Sin embargo, el único elemento que no se remonta a los Magos es la doctrina del ascenso a través de los siete planetas para unirse con lo divino. Este componente puede haber sido una adición posterior, y puede tener sus orígenes en el misticismo de Merkabah.

Esencialmente, el misticismo de Merkabah es un método de magia astral, idéntico al de los Misterios de Mitra, que impregnaba tanto el misticismo helenístico, una similitud que puede ser el resultado de que los soldados romanos entren en contacto con las doctrinas místicas judías durante su invasión de Palestina. Habiendo sido enviada por primera vez al Éufrates en 63 a. C. para luchar contra los partos, del 67 al 70 d. C., la Decimoquinta Legión Apolínea participó en la represión del levantamiento de los judíos en Palestina, cuando 97,000 judíos, según Josefo, fueron capturados. Esta legión acompañó a Tito a Alejandría, donde probablemente fueron reforzados por reclutas de Capadocia en Asia Menor. Parece haber sido una curiosa mezcla de estos varios elementos, después de que la Legión había sido transportada a Alemania, que erigió el primer templo dedicado a Mitra en el Danubio.

SEGÚN KAUFMAN KOHLER, en un artículo SOBRE EL MISTICISMO DE MERKABAH EN LA ENCICLOPEDIA JUDÍA, a la luz de la evidencia y la Liturgia de Mithras, los ritos del Mitraismo "tienen una semejanza tan sorprendente con aquellos por medio de los cuales los jinetes de Merkabah se acercaron a la Deidad que allí apenas puede haber dudas sobre el origen mitraico de este último ". En Merkabah, el místico asciende a través de los siete planetas con la ayuda de un dios mediador llamado Metratron, el equivalente de Enoc. Este Metratron es el hombre arquetípico que se convirtió en una doctrina común no solo de Filón de Alejandría sino también del gnosticismo.

La doctrina del Hombre Primordial, era conocida por los zoroastrianos como Gayomart, o como Anthropos para los caldeos, quienes, según el Padre Cristiano Hipólito, "dicen que este Adán es el hombre que solo trajo la tierra. Y que él yacía inanimado". inmóvil, (y) todavía como una estatua; siendo una imagen del que está arriba, que se celebra como el hombre Adán, habiendo sido engendrado por muchos poderes, con respecto a quién individualmente es una discusión ampliada"

DEL MISMO MODO, SEGÚN PLUTARCO, ZOROASTRO:

“... declaró que, entre todas las cosas perceptibles para los sentidos, Ahura Mazda puede compararse mejor con la luz, y Ahriman, por el contrario, con la oscuridad y la ignorancia, y a medio camino entre los dos está Mitra; Por esta razón, los persas dan a Mitra el nombre de Mediador”

Los jinetes de Merkabah buscaron tener una visión como la descrita en el primer capítulo de Ezequial, de Dios en su carro. Apoyando el carro, había cuatro "criaturas", cada una con un cuerpo humano, dos pares de alas y patas cortadas como las de un ternero. Cada criatura tenía cuatro caras, de un hombre, un león, un buey y un águila, entendida esotéricamente para representar las cuatro estaciones y elementos. Esta imagen no solo recuerda a Kronos of the Orphics, sino que también es similar a la Leontocefalia del Mitraísmo, representada de pie en un globo, en el que hay dos círculos que se cruzan entre sí, que Celsus explicó, es un símbolo de las dos órbitas en cielo, uno siendo el de las estrellas fijas y el otro asignado a los planetas.

Varios historiadores judíos antiguos habían equiparado a Zoroastro con Ezequial, una identificación que parece haber sido replicada en los misterios mitraicos. En los escritos pseudoepigráficos atribuidos a Dionisio el Areopagita, el converso de San Pablo, se hace referencia a un milagro por el cual el día se alargó tres veces, y se dice que ocurrió en el tiempo de Ezequiel. Se dice que ha afirmado que, en consecuencia, los registros sagrados de los persas hacen especial mención, y hasta el día de hoy los magos celebran los ritos conmemorativos de los triples Mitras. Del mismo modo, Cosmas Indicopleustes, afirmó que, se informa que hasta el momento los persas mantienen la fiesta de Mitra, es decir, del Sol, en memoria del milagro de la época de Ezequiel.

Según Zosimus, el proceso alquímico es el Mithraic Mystery, el misterio incomunicable. Por lo tanto, podemos entender el sistema mitraico como lo explica Celsus. La conversión del plomo en oro implicaba la purificación del alma al eliminar los niveles sucesivos de impurezas, comenzando con el plomo, que, según el sistema mitraico descrito por Celsus, es la primera puerta, el planeta Saturno, luego asciende por los otros seis planetas, culminando en el sol, simbolizado por el oro.

FUENTES CONSULTADAS
Jewish Enciclopedy
Britanic Enciclopedy
Wikipedia



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